No hubo muchas oportunidades para practicar así que fuimos a la competición con la duda de si seríamos capaces de superar la difícil prueba.
Como éramos los penúltimos en participar tuvimos la oportunidad de ver lo que hacían los demás, hubo de todo, muchos trompazos, muchos fallos y algún buen pilotaje, habría que hacerlo perfecto para quedar los primeros, pero confiábamos en nuestro piloto.
Por fin nos llegó el turno, el equipo saltó al campo y Darío comenzó a pilotar, los nervios estaban a flor de piel. Había que tener mucho control y mucha suerte para no estrellar el aparato, Darío iba muy bien, pero la suerte se acabó, al ajustar el giro en una de las curvas, un roce con una banderola hizo caer el dron. A pesar de que el golpe habñia sido muy ligero, fue suficiente para romper una de las hélices y hubo que abandonar.
Aún no estaba todo perdido, a otros equipos les habían dejado repetir la prueba, así que rápidamente cambiamos la hélice rota y lo intentamos de nuevo. El dron volcó casi antes de levantarse del suelo, inmediatamente nos dimos cuenta del problema, el aspa de repuesto no era la que correspondía a la posición del motor (mea culpa) éramos los últimos participantes y la prueba se había alargado demasiado, no había tiempo para otra oportunidad.
Sabiendo donde estaba el fallo, fue fácil de arreglar y el dron levantó de nuevo el vuelo y aunque ya fuera de competición, sirvió para quitar un poco, el mal sabor de boca por el accidente sufrido.
Enhorabuena a todos los equipos participantes, especialmente a los ganadores, el IES Bernaldo de Quirós de Mieres y gracias al Círculo Aeronáutico por darnos la oportunidad de introducirnos en el mundo de los drones.
Practicando
Tecnología de 4º ESO
Llegamos al campo de fútbol del Langreo
Colocando el circuito
Nuestro equipo
Los participantes preparados
Los de la TPA en directo
¡A por ellos!
Preparados, listos ...
La hélice rota ...